MORA CF - BAKU HELLIN DPTO. (0-1)
El Mora sigue en caída
libre tras perder en Las Delicias por la mínima ante el Hellín. El
cuadro moracho se sitúa en una zona incómoda de la tabla clasificatoria
tras perder un choque en el que al menos mereció una igualada. Por su
parte, el cuadro de Yoyo Ocaña sabía que tarde o temprano le llegaría la
oportunidad de adelantarse en el marcador, aunque es cierto que
tuvieron que esperar hasta el 85.
El Hellín se presentó en Mora con la ausencia significativa de su
importante delantero Casiano, que se encuentra en estos momentos en
Azerbaiyán junto a Manolo Martínez, en busca de dinero del patrocinador
del club. El partido en su primera parte fue soporífero con dos equipos
jugando siempre en el centro del campo, con demasiado respeto entre
ellos y con escasas ideas futbolísticas. La escuadra que dirige Carlos
Tomás Viso, sufrió un contratiempo cuando su defensa central César tuvo
que abandonar el terreno de juego al acusar un pinchazo en un muslo.
Corría la media hora de juego y el entrenador local colocó a Josué de
central y metió a Juanfran más adelante. De aquí al final de la primera
el dominio le correspondió al Mora pero sin conseguir trenzar un buen
juego hilvanado en la zona medular pese a contar con dos jugadores de
tanta técnica como Butra y Ocaña.
Tras el paso por los vestuarios se animó algo más la contienda, sobre
todo por parte blanquilla, y de esta manera llegaron dos ocasiones de
gol para el equipo de Las Delicias. De esta manera, Juanfran no supo
resolver en buena posición y a la salida de un córner con un cabezazo
que se le marchó alto por encima del marco. Poco después fue Rodri quien
tuvo el gol pero su remate de chilena no cogió los tres palos. Se
estiraba un poco más el cuadro de Ocaña y Juanqui pudo desnivelar el
choque a su favor, pero su disparo se topó con un portero corejano muy
acertado.
Iba el choque para cero a cero cuando en el 85 Josué derribó al
delantero costamarfileño Kamaté al borde del área, en una acción en la
que además vio la cartulina amarilla. El propio Kamaté tendido en el
suelo soltó el brazo sobre su adversario, en la rodilla, y el colegiado
entendió agresión y le mostró la roja directa. Se lanzó el golpe franco y
fue el capitán Felipe Belmonte quien de disparo con rosca perfecto
sorteó la barrera y por alto llevó el balón a la red de Buyo. Los
últimos momentos fueron de acoso local con más corazón que cabeza sin
generar ni una sola ocasión.
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