Jornada 32. El Mora cae ante el Madridejos

MORA CF - CD MADRIDEJOS (0-1)
 La pegada del Madridejos fue determinante para que los azulones se llevaran el derbi con el Mora en Las Delicias. En un partido que estuvo siempre equilibrado, los visitantes encontraron el gol del triunfo cuando, precisamente, mejor se sentían sobre el campo los blancos.
El duelo comenzó con algo más que respeto entre ambos, aunque fue Buyo el primero que tuvo que intervenir para evitar un disparo desde la derecha de Alfonso. Poco después, la réplica la dio Dani Navarro, con un cabezazo que despejó Miguel Ángel. El siguiente en avisar fue Elie, con una carrera interminable en la que se plantó ante el cancerbero local para que, en el mano a mano, entre Otero y el guardameta abortaran su remate.

Con estas acciones, ambos mostraron sus intenciones: el Madridejos buscando las carreras de Elie y los centros desde la banda; y el Mora con las segundas jugadas de Chanete y las individualidades de Barbosa. Los dos, eso sí, mostrando su predilección por sacar petróleo de alguna jugada a balón parado.
La lucha en un centro del campo superpoblado limitó las combinaciones, aunque favoreció los robos. Como ejemplo, uno de Novillo que habilitó el disparo de Agus. El mediocentro, sin embargo, no vio la incorporación a la jugada del ex futbolista del Mora, la que hubiera sido una mejor opción que un lanzamiento que se perdió por la línea de fondo.
Se echaba de menos más continuidad en el juego, pero ni el Mora propuso en exceso, confiando en la figura de Chanete, ni el Madridejos se sentía obligado a tener la pelota. Y es que los de Sergio Rubio estaban cómodos sobre el terreno y los únicos sobresaltos que tuvieron al finalizar la primera parte los protagonizó un solo hombre, Barbosa. Primero, el extremo forzó una falta que el mismo ejecutó, marchándose fuera por muy poco. Posteriormente, llegó algo forzado a un cambio de juego y su tiro le salió alto.

Cambios. Tras el paso por los vestuarios, el partido se reanudó con la mala noticia de la sustitución de Barbosa. Estaba siendo el mejor y unos problemas musculares le dejaron en la caseta. Por su parte, Rubio dio entrada a Fran Simón en la medular en detrimento de Agus; iba a por el triunfo.
El primer acercamiento fue un cabezazo desviado de Alfonso, pero fue en el minuto 54 cuando el cuadro azulón dispuso de su mejor ocasión. Elie se llevó el balón a trompicones pero se logró plantar ante Buyo, al que superó con un quiebro. El delantero conectó después un latigazo a una portería vacía, pero su lanzamiento se encontró con la rectificación del cancerbero olivarero, quien salvó el tanto de forma milagrosa.
El susto le vino bien a un Mora que reaccionó con más presencia sobre la portería de Miguel Ángel. Borja entró más en juego y pronto el peligro tuvo sus frutos, con un pase hacia la posición de Chanete, al borde del área. Con una buena maniobra, el ariete se dio la vuelta y se abrió el hueco necesario para un disparo seco y envenenado. Sólo el poste pudo evitar que el tiro acabase en la red.
Poco después, otra vez Borja ganó con eficacia la banda derecha y tuvo tiempo de seleccionar un buen destino para su centro. Al servicio, algo pasado, acudió Héctor, cuyo empalme se marchó desviado por poco.
Eran los mejores minutos de los Kiko Vilches que, lejos de verse reflejados con un gol en el marcador, fueron penalizados con el 0-1. El Madridejos dio entrada a Vela para sumarse a la defensa y jugar con tres centrales, pero con los laterales muy largos, buscando más profundidad y empuje.
Apenas hubo tiempo para comprobar si la decisión iba a cambiar la tendencia porque de forma inmediata llegó la jugada del gol. Pablo entró bien por la izquierda y ejecutó un centro al corazón del área. Allí, Elie, libre de marca, cabeceó a la red y lejos del alcance de Buyo para desequilibrar el derbi.
Desde entonces, el Madridejos acumuló más efectivos por detrás de la pelota con la intención de conservar su valioso gol. Esto propició que el Mora ganase presencia y Josué estuvo a punto de poner el empate en el marcador, pero Miguel Ángel, no sin apuros, despejó el peligro. Ya en el descuento, las mejores ocasiones las tuvo Buyo. Sí, el cancerbero moracho, que se sumó en los saques de esquina, pero sus remates no cambiaron el signo del derbi.