El
Mora CF no está dispuesto a perder la condición de invicto que ostenta
desde que arrancó 2016 y en el José Camacho de Manzanares (16:30 horas)
intentarán puntuar a sabiendas de que es un campo complicado a pesar de
que los ciudadrealeños no pasan por su mejor momento, ya que no vencen
precisamente desde que se cambió de año.
Kiko Vilches lo sabe y confía en aprovechar esta situación y que no se
están cumpliendo los objetivos en el cuadro de Guillermo Alcázar, que ha
regresado para reconducir el rumbo. Una vez más, las bajas serán la
principal traba a la que se deberán enfrentar los toledanos, sobre todo
en defensa. Y es que, Héctor se pierde esta cita por lesión, mientras
que Otero no podrá jugar tras ver la quinta cartulina amarilla en el
derbi toledano del pasado domingo contra el Madridejos en Las Delicias.
A
ellos se une el delantero Rodri, todavía convaleciente de su lesión y
que deberá esperar más tiempo para regresar a los terernos de juego.
De todos modos, el entrenador de los olivareros tiene la buena noticia
de la recuperación de Mínguez, un pilar fundamental para su equipo. No
se ha ejercitado al ciento por ciento y prefiere dejarle en duda, pero
hay un alto porcentaje de posibilidades de que esté en el José Camacho
de la localidad ciudadrealeña, aunque sea saliendo desde el banquillo.
Un feudo imposible. Los números dicen que el campo del
Manzanares no es nada propicio para el Mora CF. Se han medido cinco
veces militando en el grupo castellano-manchego de Tercera División y el
conjunto blanco nunca ha logrado ni siquiera empatar. Ha perdido los
cinco encuentros y casi siempre con un marcador abultado. En la
temporada 1993/94, el Mora cayó por 4-1, mientras que en la 1996/97 lo
hizo por 3-1. Más recientemente, en el ejercicio 2012/13, el partido
acabó 2-1 para los locales y en el 2013/14 1-0. También se fue para el
mismo lado la campaña pasada (2014/15) con un resultado de 3-1.
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