MORA CF - MANZANARES CF (1-2)
El Mora sigue empeñado en
meterse en problemas y ayer, ante el Manzanares, cosechó una nueva
derrota que hace su situación aún más delicada. Además, no están
teniendo suerte en sus partidos en Las Delicias los olivareros, ya que
se les escapan partidos en los que, al menos, merecen el empate.
El partido comenzó con polémica. Corría el tercer minuto de juego
cuando Edu Corrales penetró escorado en el área local y cayó por un
supuesto agarrón del defensa Cabrera. El árbitro Ruipérez Marín no vio
nada y consideró la acción como piscinazo, por lo que mostró amarilla
para el delantero. La jugada fue dudosa y el Manzanares reclamó la pena
máxima.
El partido entró en una fase de toma y daca entre los dos equipos con
el juego encorsetado en el centro del campo. Sin embargo, el fuerte
viento de la tarde carnavalesca hizo que ambos estuvieran muy
imprecisos. El Mora empezó a despertar sobre el minuto 20 del primer
tiempo cuando probaron fortuna Morales y Pablo, pero sus disparos se
marcharon fuera por pocos centímetros.
A la media hora, Buyo realizó una parada de mérito al detener un
peligroso disparo lejano de Edu Corrales. Y reaccionó el Mora después
cuando, en el minuto 35, anotaba el gol que parecía abrir el marcador.
Sin embargo, Ruipérez Marín volvía a ser protagonista al anular el tanto
por falta de Morales al meta. Hubo ligeras protestas locales por esta
acción, debido a que fue fuera del área pequeña. Justo antes del
descanso, el cuadro local recibió un buen susto cuando el portero tuvo
que sacar bajo palos un cabezazo de Carlos Arroyo que tenía pinta de
0-1.
La vuelta de vestuarios comenzó con un Mora muy activo merced a dos
saques de esquina. En el primero, un disparo de Pablo se fue por encima
del travesaño y, en el segundo, César de cabeza la mandó al larguero.
Del 1-0 se pasó al 0-1 tras una contra letal del cuadro que dirige
Guillermo Alcázar. Una combinación entre Elías y Carlos Arroyo, que
finalizo éste entregando a Edu Corrales para que batiera por bajo a
Buyo.
El Mora estuvo a merced de su rival tras el gol, cosa que el Manzanares
aprovechó para anotar el segundo, que tuvo características similares al
primero. En esta ocasión, la combinación fue entre Martín y Carlos
Arroyo y, de nuevo, éste asistió a Edu Corrales para anotar por bajo
otra vez al guardameta toledano.
El Mora se lanzó al ataque, dejó su defensa huérfana y estuvo a punto
de encajar el tercero en una acción de contragolpe. Perdonó el
Manzanares y aprovechó Rodri para acortar distancias tras recibir un
buen pase de Noé. Tras el gol, los locales lo intentaron hasta el final,
incluso con un remate de su portero en la última jugada del partido,
pero no consiguió empatar, algo que pudo ser lo más justo a tenor de lo
sucedido.
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